Los responsables de la cadena de franquicias de lavanderías autoservicio Fresh Laundry destacan el auge de utilización de estos servicios por parte de las familias debido al gran ahorro que suponen.

La ventaja para los clientes está clara: el ahorro. El uso de lavanderías autoservicio permite ahorrar 675 euros anuales en la factura de la luz. Y es que lavadora y secadora representan el 11% del gasto energético total del hogar mientras que una lavadora de una lavandería autoservicio tiene el triple de capacidad que una normal. El ahorro total al utilizar los servicios de las lavanderías autoservicio se eleva a los 1.000 euros anuales si se suma el gasto de agua y productos de limpieza necesarios para hacer la colada, lo que supone un ahorro de casi 20 euros por semana para una familia media.

Estos son los datos aportados por Fresh Laundry, cadena de franquicias de lavandería autoservicio, cuyos responsables destacan el auge del uso de este tipo de servicios. “Cada vez son más las familias que optan por el uso de las lavanderías autoservicio por una cuestión de comodidad, practicidad, ahorro de tiempo y dinero. Los cambios de hábito de la población actual son evidentes y muestra de ello es el aumento del número de usuarios en nuestros establecimientos, llegando a los 240.000 en 2016”, pone de manifiesto Roberto Haboba Gleizer, propietario y fundador de Fresh Laundry.

Con este cambio de costumbres entre los españoles, asegura Haboba, el sector de las lavanderías autoservicio está en pleno auge, imitando hábitos típicos de la cultura estadounidense o la francesa.

Fresh Laundry cuenta con 41 establecimientos y se encuentra inmersa en pleno proceso de expansión por toda España.

La inversión necesaria para montar una franquicia Fresh Laundry es de 80.000 euros.